En un artículo publicado en el Diario Financial Post se dio a conocer que la minera canadiense Gran Colombia Gold presentó una demanda por US $ 700 millones contra Colombia después que la Corte Constitucional ordenó en febrero de este año a la compañía cesar con sus actividades en el sitio llamado El Burro, en Marmato hasta que se consulte con los habitantes del la localidad.

La comunidad siempre ha estado en contra de los proyectos de la minera en su territorio, y ahora que la Corte Constitucional ha tenido en cuenta sus opiniones ha llegado la hora de que la gente de la zona tome riendas en el asunto y decidan si permitirán que continúen las explotaciones.

Esta explotación minera es uno de los proyectos principales de la compañía, estimando que hay 14 millone de onzas de oro, representando el año pasado el 16 % de las ventas totales, pero debido a las controversias y oposiciones que han rodeado el proyecto las acciones de la compañía han bajado de US $ 11,50 hace cinco años a US $ 0,10 por acción al día de hoy.

Esta demanda a Colombia por no dejar que continúen las actividades mineras en el territorio sin preguntarle a la gente es un «acto desvergonzado» como lo calificó el presidente de la Asociación de Mineros Tradicionales Rubén Darío Vanegas, planteando que el Gobierno canadiense debe regular mejor las actividades extrangeras de sus empresas. Ahora esperemos que la comunidad decida si quiere o no seguir con las actividades en su región.

Información: El Espectador.