Se trata del proyecto PlasticRoad, en donde se pretende utilizar plástico que se rescata del mar evitando que millones de toneladas de CO2 producto de la fabricación y tendido de asfalto sean dispuestas en la atmósfera.

Esta iniciativa usa bloques de polímeros, a partir de plástico que se recupera del mar, para de esta manera formar una estructura tipo bloques de lego que se unen para formar la vía, en vez de verter cemento y asfalto, en Rotterdam serán puestos estos bloques de manera inicial, así los autos rodarán sobre polímeros.

No solo se pretende atacar el problema de la gran cantidad de plástico que afecta los mares, sino que se quiere evitar que millones de toneladas de CO2 producto del cemento y el asfalto, sean liberadas a la atmósfera, disminuyendo así el impacto ambiental de las obras viales. La empresa que ha tomado esta iniciativa se llama VolkerWessels.

Lo bueno de una calzada a partir de polímeros es que puede soportar temperaturas extremas entre los -40 °C hasta los 80 °C, además el tiempo de su instalación es mucho menor, no meses sino semanas. Los bloques son prefabricados en las empresas y luego son llevados hasta el sitio de instalación, lo que representa una ganancia de tiempo alta.

Estos bloques para la vía ejercen menos presión sobre el suelo, lo cual evita impactos ambientales negativos sobre los microecosistemas del mismo, además, estos bloques son huecos lo que permite la instalación de cableado y tubería en su interior. Aún la idea no se ha llevado a la vida real, pero el proyecto está siendo probado en laboratorios para comprobar su seguridad ante condiciones húmedas y resbaladizas, además el proyecto busca socios.

En este vídeo se presenta un resumen del proyecto:

Por: Manuel Zárate López

Fuente: PlayGroundMag